CAMPAÑA MISIONERA - DEJA HUELLA

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Un “Bueeeeeeeeenas Somos los Misioneeeeeeeeeros” nos abrió no sólo las puertas de las casas sino lo mejor, la puerta de los corazones que se desbordaron en generosidad y amor. Una Aguapanela nos calentaba en las noches y la ilusión de la misión alentaba nuestros días. El respeto y el silencio de los campesinos, la franqueza y limpieza de los jóvenes y la incansable sonrisa de los niños era la manera como JESÚS se filtraba por nuestros poros y la forma de dejar en nuestra alma una huella que no se ha borrado. Ya cumplimos 10 años y hemos hecho 12 misiones… Ya conformamos un grupo y crecemos juntos buscando sólo ser instrumentos en las manos de JESÚS…